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Instrucciones para encender una cocina de leña: haciendo fuego a la antigua usanza

Bienvenidxs a nuestro blog ' rural life ' donde nos gusta descubrir las maneras más eco-vintag e de vivir en armonía con nosotros mismxs y nuestro entorno.  En las últimas semanas ha llegado a nuestros oídos una alarmante noticia, el 80% de los jóvenes no saben encender  fuego de manera tradicional y el 90% de los que lo han intentado han terminado con niveles muy elevados de cortisol abandonando en su tentativa. ¿Qué nos está pasando? Hemos de reconocer que muchos avances tecnológicos han facilitado sin duda nuestras vidas (o sea, las chimeneas eléctricas, estufas de pellets,...)  pero son demasiados los jóvenes que nunca han visto una cocina de leña y muchos menos los que hemos probado a alimentar a una Lacunza cuan dragón medieval con madera natural y un fósforo ¡muy crazy ! Es por ello que nos ha parecido top compartir con vosotrxs unas instrucciones básicas para que cualquiera pueda probar  los beneficios de hacer fuego a la antigua usanza, el último grito entre nuestra

Motivos por los que se ama la Navidad – PARTE II

En tres, dos, uno… ¡Ya están aquí! Las Navidades han entrado por la puerta. Siempre me he preguntado el por qué de esa dicotomía que genera la Navidad. He de reconocer que yo fui una de esas personas que preferirían hacer puenting sin cuerda a tener que planear toda la logística navideña… Si bien es cierto, la perspectiva y el modo de ‘approach’ esta época del año puede variar a lo largo de la vida. Así que, vigila tus espaldas, has de saber que si eres un Grinch o hater navideño, puedes terminar convirtiéndote en un Xmas lover ¡y al revés! Cosas de la vida…o de la edad, quién sabe. Quizás se trate simplemente de ver el vaso medio lleno.



 Después de hacer un exhaustivo trabajo de campo... e investigar sobre las causas por las que a la gente le gusta la Navidad, éstas han sido algunas de las respuestas que he obtenido:
·      Me gusta hacer repostería con mi madre (joven de 22 años)
·      Me gusta salir de fiesta en fin de año con mis amigos del pueblo a los que ya no veo tanto (joven de 25)
·      Es el único momento del año en el que veo a mi familia porque trabajo en el extranjero (Joven de 33 años)
·      Me encanta como cocina mi suegra y es ese momento del año en el que disfruto sin censura ni remordimientos, acompañado de mi familia (varón 36 años)
·      Me gusta ver la ilusión de mi hijo en estas fechas: las luces, el Belén, verlo jugar con los primos… (Mujer de 38 años)
·      Es una excusa perfecta para reunirnos en casa todos mis hijos y nietos (varón de 60)

Lo cierto es que hay un denomiador común a todas estas respuestas, y es que la #Navidad se ha convertido en ese momento del año en el que todo el mundo  saca  tiempo para dedicar a las personas a las que quiere, estén donde estén o trabajen en lo que trabajen. Eso, a priori, resulta hermoso y natural, ¿no? Una especie de Thanksgiving, un día en el que dar gracias con nuestra presencia a quienes nos quieren y de dar gracias por que aquellos a quienes queremos, simplemente estén con nosotros también. Tan sencillo como eso. Resulta que para muchos, el consumismo es accesorio – ¡habelos, hailos!-. Aquí os dejos algunas máximas que son comunes para muchos en estas fiestas:
1.     Disfrutar de la familia y sus tradiciones intergeneracionales: Sin duda alguna son fechas que -salvando fin de año-  la mayoría las pasamos en familia. Esto implica que si en tu familia sois como los Osos Amorosos, pues eres de los afortunados que pueden asociar la Navidad a dosis de felicidad y buenRo. Si por el contrario, te ha tocado el año en el que existe cierta belicosidad con algún hermano, cuñado, tí@, padres,… pues resulta comprensible que no estés exultante por experimentar una sobremesa al más puro estilo Ragnar Lodbrok: esquivando catapultas rencorosas  y zancos de pavo voladores. Evidente. Y para los del grupo dos, ¿cuál es la gran Fucking Shit? Pues que todos tus cascos azules (o sea, tus amistades) están también con sus familias y no tienes excusa para no ir con la tuya a menos que te vayas a cenar tú solo a un McAuto… siempre puedes preguntar en cocina si te dejan trinchar un McNugget o cambiar las 12 uvas por los Lacasitos del McFlurry. Si este es tu caso, ponle actitud positiva, siempre. Te darás cuenta de lo mucho que puedes hacer por tí mismo siendo positivo ante situaciones desagradables. Esto no solo rebajará las tensiones del resto de comensales vikingos sino que generarás endorfinas con el simple hecho de reirte, aunque lo fuerces un poquitito. Suelta ese zanco de pollo perforado con semillas de cayena envenenadas y cuando te llegue una catapulta, esquívala y sonríe, verás que si no te ofendes seguro que tu belicoso familiar no se divierte tanto al lanzártelas.


2.   Disfrutar de tus amigos y/o de tu pareja: ¡Hay tiempo para todo! Por eso las vacaciones de Navidad tienden a tener más lovers que haters. Todo es una simple cuestión de enfoque, de perspectiva. Aunque no seas muy hogareño o no te caiga bien tu cuñado, siempre hay tiempo para la gente con la que disfrutas. Unos días de casita rural con la pareja o reír con amigos, ¿a quién le puede sentar mal eso? Ya si ves que lo de quedar con tus amigos o estar con tu pareja tampoco te entusiasma, todo apunta a que es un buen momento para cambiar de amigos o de decirle a tu pareja que te motiva lo mismo que ver un GIF animado de la mitosis mitocondrial en bucle. Si no eres feliz y te cansa tu cara de Pug-Dog, CAMBIA, somos las decisiones que tomamos, dibuja una vida que te guste: YES WE CAN.
3.     Disfrutar de placeres tan mundanos como la gastronomía y el buen beber: En este punto sagrado me tengo que detener. Yo, treitañera que ha pasado años viviendo en el extranjero, reivindico aquí la sacralidad del ritual divino –próximo al Nirvana- que supone esa explosión de sabores de las gastronomía de mi tierra. ¡Y qué calidad! Si ej-que...cuando la materia prima es buena ¡no necesita ornamentaciones extravagantes ni camuflajes!  He de decir que lógicamente yo no viví las postguerra, pero creo que mi abuela revivió una estampa parecida al fin del racionamiento al verme comer aquellas Navidades que regresé de mi último exilio laboral. Nadie como los que estamos fuera sabemos a qué sabe esa tortilla de tu madre cuando hace años que no la pruebas, o ese jamoncito serrano por dios… –que dirás tú, pues te compras prosciutto que en USA piensan que es lo mismo y tiras millas, ¿no? Pues no. No sabe igual por mucho que le hables español al difunto gorrino italiano-. Volviendo a la Navidad, por favor, si hay alguien en este divino país (gastronómicamente hablando) que no le guste comer lo mejor de su tierra con el mayor de los amores puestos al cocinar por tus seres queridos y beber los vinos más deliciosos que tenemos, por favor que pida la nacionalidad sueca y celebre la Navidad comiendo albóndigas en el Ikea.
Seas como sea, hagas lo que hagas en estas fechas y creas en lo que creas, te deseo una muy Feliz Vida y que toda la energía positiva que hay en ti te acompañen al termino de este año para proyectarse con fuerza en el siguiente. Regala sonrisas todo el año y las sonrisas te vendrán triplicadas toda la vida.

Peace and love
By MissLdB
PD:Aprovecho este último post para dar las gracias a alguien muy especial en este 2017, un año que no olvidaré jamás:
 J, eres ese rara avis que vuela a mi lado, planeando los cielos y haciendo que la vida sea una aventura auténtica. Amo tu forma de volar, sin censurar la libertad de mis alas, viéndolas moverse y simplemente sonriendo a mi lado al verlas. Amo tu forma de respeto hacia todo lo que está vivo. Amo que le regales tu chaquetón al mendigo del Eroski. Amo que recojas las latas que otros tiran en nuestros parques naturales, donde nuestros pies descalzos han recorrido kilómetros y nuestras almas absorbido toneladas de aire puro y carcajadas. Amo que duermas conmigo al raso para soñar bajo las estrellas y dibujar nuestras vidas en el firmamento. Tú haces que el mundo sea un lugar más noble, más bello, más brillante, por el simple hecho de que tú estás en él. Amo la ingenuidad con la que me preguntas el cómo “alguien como yo” está con “alguien como tú” porque sólo eres capaz de ver lo bueno en los demás. Gracias por compartir conmigo lo más valioso que tengo: mi tiempo vital. Y por hacer que por primera vez en mi vida entienda, profunda e inmaculadamente, el significado de la tan manida palabra amor.
Tú me has hecho ver que la magia existe, que yo soy un Hada y tú mi Duende. ¿Corremos juntos por el bosque a ver quien llega primero a la cascada de los sueños? ;)

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